Por Erick Rios
Ubicado a solamente una hora y media de la Ciudad de México y a 30 minutos de Cuernavaca, Tepoztlán es de esos pequeños grandes destinos en donde encontrarás todo en un solo lugar: naturaleza, buen clima, gastronomía, construcciones coloniales y zonas arqueológicas; además del encanto especial de uno de los pueblos mágicos más bellos del país.
Lo primero que resalta en Tepoztlán es el imponente cerro de El Tepozteco, el cual forma parte del Parque Nacional El Tepozteco, decretado como área natural protegida en 1937. A las afueras del poblado (a sólo 10 minutos a pie del centro), encontraremos el sendero que nos conduce a la cima.
Se requiere de buena condición física para subir, pues no es sencillo el trayecto siempre cuesta arriba, sin embargo la vista que se tiene desde la cima vale la pena el esfuerzo, pues a nuestros pies veremos el imponente valle rodeado de verdes cimas, con el pueblo en medio; simplemente impresionante.
Además de senderos alternos para explorar la reserva, nos aguarda un invaluable tesoro: la Zona Arqueológica El Tepozteco, sitio creado por los tepoztecas hacia el año de 1300 como un adoratorio dedicado a Ometochtli-Tepoxtécatl, deidad relacionada con el pulque, la fecundidad y las cosechas.
De regreso al pueblo, sobresale el Ex convento de La Natividad, fundado por frailes dominicos en el siglo XVI y declarado en 1994 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En la parte posterior del edificio encontraremos el Museo de arte prehispánico Carlos Pellicer, compuesto de piezas donadas por el poeta.
Pero la mejor experiencia la tendremos al caminar por las calles empedradas, con rincones únicos que te sorprenderán en todo momento. Descubre pequeños restaurantes, cafés, bares, tiendas de artesanías, el mercado municipal y por supuesto, las famosas y originales Tepoznieves, ¡son más de 300 sabores!
Recorrer Tepoztlán es toda una experiencia y no basta con visitarlo una sola vez, pues su encanto y energía te harán regresar o incluso quedarte aquí. Su clima, siempre templado, hace del lugar una visita adecuada en cualquier época del año. Ven, ¡te invitamos a Tepoztlán, llámanos!
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